lunes, 1 de abril de 2013

Reflexiones...


Todo escritor se da una tregua, un tiempo,
yo, aprendiz de hilvanar palabras,
me lo di.

Vuelvo con el corazón lleno,
de ilusiones y sentimientos,
de pensamientos que revolotean,
al papel en blanco.

Palabras que vuelan,
como mariposas distraídas,
sin saber donde posarse,
en un jardín lleno de flores.

Las dejo caer, con suavidad,
con el cariño y ternura de antaño,
sintiéndolas,
dentro de mi poesía.

Llegarán a tu corazón,
saliendo del mío,
llenas de vida.

P.M